Obedecer la Palabra de Dios – El Poder de Dios
La palabra de Dios dice que el obedecer es
mejor que los sacrificios y nos enseña, nos exhorta que debemos obedecer a Dios
antes que a los hombres.
Para hablar de la obediencia acudimos a
la palabra de Dios; cuando Moisés y los ancianos en el monte Sinaí dieron a
conocer al pueblo de Israel las palabras
de Jehová y la ley, el pueblo dijo obedeceremos. Éxodo 24:7 Después tomó el libro de la alianza y se lo leyó al pueblo,
y ellos dijeron: Pondremos toda nuestra atención en hacer lo que el Señor ha ordenado.
El Señor respondió a Moisés:
Josué, hijo de Nun, es un hombre de espíritu. Tómalo y pon tus manos sobre su
cabeza. 19 Luego
preséntalo ante el sacerdote Eleazar y ante todo el pueblo, y dale el cargo
delante de todos ellos; 20 pon sobre él
parte de tu autoridad, para que todo el pueblo de Israel le obedezca. Números 27:18-20,
Y en el Nuevo Testamento
continua la exhortación a obedecer la
Palabra de Dios, Romanos 16:26-27 Ahora conocemos ese plan por
medio de lo que escribieron los profetas. Además, Dios, que vive para siempre,
así lo ordenó, para que todo el mundo crea y obedezca al Señor. 27 Y ahora, por medio de
Jesucristo, alabemos por siempre al único y sabio Dios. Amén.
Definición de Obediencia: Acción
de obedecer, sumisión de una cosa a otra. Sin: acatamiento, subordinación.
El Pueblo de Israel es llamado a obedecer la palabra de Dios.
Entonces el
Señor les hará prosperar en todo lo que hagan, y en hijos, en crías de ganado y
en cosechas; sí, el Señor su Dios volverá a complacerse en hacerles bien, como
antes se complacía en hacerlo a los antepasados de ustedes, 10 si es que
obedecen al Señor su Dios y cumplen sus mandamientos y leyes escritos en este
libro de la ley, y se vuelven a él con todo su corazón y con toda su alma.
Deuteronomio 30:9-10
Dios pide al pueblo de Israel
que se guarde en obediencia. Josué 24:24, Y el pueblo respondió: Nosotros
serviremos al Señor nuestro Dios, y haremos lo que él nos diga.
Dios conoce todas las cosas y
sabía que continuamente el pueblo de Israel
tendía a desobedecer los mandatos establecidos en la ley y por consiguiente venia el mal
sobre él. El obedecer la palabra de Dios guardaría al pueblo de Israel de pecar
contra Dios, esto le guardaría en santidad y traería bendición y prosperidad.
Abraham era
un claro ejemplo de obediencia a Dios. Génesis 12:1-4 Un día el Señor le dijo a
Abram: Deja tu tierra, tus parientes y la casa de tu padre, para ir a la tierra
que yo te voy a mostrar. 2 Con tus
descendientes voy a formar una gran nación; voy a bendecirte y hacerte famoso,
y serás una bendición para otros. 3 Bendeciré a
los que te bendigan y maldeciré a los que te maldigan; por medio de ti
bendeciré a todas las familias del mundo. 4 Abram salió
de Harán tal como el Señor se lo había ordenado. Tenía setenta y cinco años
cuando salió de allá para ir a la tierra de Canaán.
Dios llama a
Abraham; para que salga de su tierra y de la casa de sus padres a la tierra que él le mostraría y se fue como
Jehová le dijo. Dios prueba a Abraham y
le dijo, toma a tu hijo y ofrécelo en holocausto y Abraham obedeció a la voz de
Dios porque el confiaba y esperaba en Él y Dios lo bendice por cuanto obedeció
a su voz.
La bendición de obedecer la palabra de Dios para ser un pueblo especial.
Si ustedes cumplen los mandamientos que les he dado en este día, y aman
al Señor su Dios, y lo adoran con todo su corazón y con toda su alma, 14 él hará que
vengan a su tiempo las lluvias de otoño y las de primavera, para que ustedes
cosechen su trigo y tengan vino y aceite. 15 También hará
que crezca hierba en el campo para el ganado de ustedes, y que ustedes tengan
comida en abundancia. Deuteronomio 11:13-15
El amor de
Dios hace especial a los suyos porque les provee de todo y no les falta nada, lo único que pide es que
seamos obedientes. Dios se complace con su pueblo que se guarda en santidad
obedeciendo y poniendo por obra su palabra dándole bendiciones en
abundancia.
Pasaje para
memorizar:
Josué 1:8 Recita siempre el libro de la ley y medita en él
de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así
prosperarás y tendrás éxito.
El Poder de
Dios