El Equipo del Cuerpo de Cristo – El Poder de Dios
Él fue quien les dio a unos la capacidad de ser
apóstoles; a otros, la de ser profetas; a otros, la de ser evangelistas; y a
otros, la de ser pastores y maestros. 12 Hizo esto para que todos los que formamos la
iglesia, que es su cuerpo, estemos capacitados para servir y dar instrucción a
los creyentes. 13 Así seremos un grupo muy unido y llegaremos a
tener todo lo que nos falta; seremos perfectos, como lo es Cristo, por conocer
al Hijo de Dios y por confiar en él. Efesios
4:11-13
La Palabra de Dios valora a
cada miembro del cuerpo de Cristo, que es la Iglesia y, nos enseña que debemos
servir, siendo un solo cuerpo en Cristo Jesús, cada uno desarrollando la función
que Dios le dio.
Dios ha dado a su iglesia una enorme responsabilidad en
todas las naciones; hacer discípulos, predicar, enseñar, sanar, nutrir, dar,
administrar, edificar y muchas tareas más. Si tuviéramos que cumplir este
mandato como individuos, es muy probable que nos rendiríamos fácilmente pues sería
una tarea imposible. Pero Cristo nos ha llamado ser miembros de sus cuerpo.
Algunos podemos cumplir con una tarea, otros con otra, sin embargo estoy seguro
que juntos podemos hacerlo mejor de lo que lo haríamos individualmente. Trabajando
juntos expresamos la plenitud de Cristo, como cuerpo de Él.
1. El Cuerpo de Cristo se ve la importancia de cada miembro de la iglesia.
La iglesia
de Cristo es como el cuerpo humano. Está compuesto de distintas partes, pero es
un solo cuerpo. 13 Entre
nosotros, unos son judíos y otros no lo son. Algunos son esclavos, y otros son
personas libres. Pero todos fuimos bautizados por el mismo Espíritu Santo, para
formar una sola iglesia y un solo cuerpo. A cada uno de nosotros Dios le dio el
mismo Espíritu Santo. 14 El cuerpo no
está formado por una sola parte, sino por muchas. 1Corintios
12:12-14
a) Todos los creyentes son miembros del
cuerpo de Cristo.
I) Lo que la Palabra de Dios nos está diciendo,
en esencia es:”Mira tu propio cuerpo” Tienes manos, pies, ojos, oídos, no son
miembros aislados, separados unos de otros, sino un solo cuerpo.
II) Esta unidad
esencial en el cuerpo, es gracias al Espíritu Santo, de tal forma que no
importa tu nacionalidad o estatus económico ni social. Si has aceptado a Cristo
como tu único y suficiente salvador, ahora eres parte de su cuerpo.
b)
Formamos
un solo cuerpo en Cristo, y cada miembro está unido a todos los demás.
…así también nosotros, aunque
somos muchos, formamos un solo cuerpo en Cristo y estamos unidos unos a otros
como miembros de un mismo cuerpo. Romanos
12:5
I) Estamos no solo
conectados a nuestro Señor Jesús, que es nuestra cabeza, también estamos unidos
unos a los otros. El hecho es, que no podemos estar conectados a Cristo sin
estar unidos a nuestros hermanos y hermanas en Cristo.
II) Es nuestra obligación
estar conectados a otros miembros del cuerpo, tener comunión con los demás miembros
del cuerpo y la cabeza.
c)
Un
cuerpo no puede estar compuesto de un solo miembro
El cuerpo no está formado por
una sola parte, sino por muchas. 1Corintios
12:14
I) El Cuerpo de
Cristo no puede estar compuesto tan solo de una cabeza, sin miembros u órganos. Su cuerpo
consiste de muchos miembros. Simplemente
no podemos ser uno en Cristo sin ser uno con su cuerpo también.
II) Nuestra necesidad
no es tan solo de la cabeza, es de todo el cuerpo. Estamos unidos no solamente
a la cabeza que es Cristo, sino también como parte de un cuerpo a los demás miembros
del mismo.
2. Cada parte del Cuerpo de Cristo tiene una función especial que es necesaria en su totalidad.
Si al pie se
le ocurriera decir: “Yo no soy del cuerpo, porque no soy mano”, todos sabemos que
no por eso dejaría de ser parte del cuerpo. 16 Y si la
oreja dijera: “Como yo no soy ojo, no soy del cuerpo”, de todos modos seguiría
siendo parte del cuerpo. 17 Si todo el
cuerpo fuera ojo, no podríamos oír. Y si todo el cuerpo fuera oído, no
podríamos oler. 18 Pero Dios
puso cada parte del cuerpo en donde quiso ponerla. 19 Una sola
parte del cuerpo no es todo el cuerpo. 20 Y aunque las
partes del cuerpo pueden ser muchas, el cuerpo es uno solo. 1Corintios 12:15-20
a) Cada miembro tiene su forma, lugar y uso.
I) Las partes del
Cuerpo, son diferentes, hay diversidad de miembros en el cuerpo de Cristo y
cada uno tiene un propósito específico.
II) Así, que cada
joven cristiano como miembro del Cuerpo de Cristo tiene un lugar de acuerdo a
los diferentes dones, y talentos que Dios le dio, para servir en comunión y
unidad con los demás miembros con distintos dones para alcanzar un mismo
objetivo.
b)
Todos
los miembros del cuerpo son útiles y necesarios
unos para otros.
Pero Dios puso cada parte del
cuerpo en donde quiso ponerla. 19 Una sola
parte del cuerpo no es todo el cuerpo. 20 Y aunque las
partes del cuerpo pueden ser muchas, el cuerpo es uno solo. 21 El ojo no
puede decirle a la mano: “No te necesito”. Tampoco la cabeza puede decirle a
los pies:”No los necesito”. 1Corintios
12:18-21
I) No hay un miembro
del Cuerpo de Cristo que no deba, ni pueda ser de provecho a sus co-miembros,
el bien del todo debe ser el objetivo de todos.
II) Todos los
Cristianos dependen unos de otros; cada uno tiene que esperar y recibir la
ayuda de los demás. Entonces tengamos más unidad, debemos estar estrechamente
unidos por los lazos más fuertes del amor en Cristo.
c) La diligencia para servir en el Cuerpo de Cristo
Esfuércense, no sean perezosos
y sirvan al Señor con corazón ferviente. Romanos 12:11
I) Dios quiere que
seamos diligentes y nos pongamos a trabajar de acuerdo a los dones y talentos
que Él nos dio.
II) Es necesario que entendiendo tu posición dentro del
Cuerpo de Cristo te dispongas ya para servir y trabajar. Ve de qué manera
contribuyes a la edificación de la
iglesia y tu comunidad, estando dispuesto
a poner todas tus capacidades y tu vida entera al servicio de Dios.
Para finalizar con este tema, hagámonos algunas preguntas y
reflexionemos al respecto.
¿Somos miembros que pertenecen al Cuerpo de Cristo?
¿Estamos sirviendo activamente?
¿Contribuimos dentro del Cuerpo de Cristo?
Evaluemos por un momento nuestra participación como miembros del Cuerpo de Cristo: “Padre
Celestial, gracias por hacernos parte de tu cuerpo. Que sea nuestro deseo ser
una parte activa de tu iglesia sirviéndote, danos la oportunidad para llevar a
cabo la obra que tú tienes designada para tu iglesia, úsanos Señor. Lo pido en
el nombre del Señor Jesús, Amen”.
El Poder de Dios